El Instituto Silestone ha presentado su estudio «La vivienda del futuro de la Generación Z en España» donde pone de manifiesto las preferencias de esta generación en materia de vivienda y qué tipo de inmuebles buscan.
Cuando hablamos de Generación Z, nos referimos a los jóvenes nacidos entre mediados de los 90 y la década de los 2000, siendo la generación más conectada ya que han nacido bajo normas y pautas nuevas que corresponden al mundo digital, lo que condiciona su forma de trabajar , relacionarse o de comprar.
Silestone pone de manifiesto estas nuevas tendencias, y avanza cómo será la vivienda del futuro. Según el estudio, los jóvenes apostarán por un modelo de vivienda tradicional: 6 de cada 10 optan por una casa y el 30% elegiría un piso. Por zonas geográficas, sí existen variaciones importantes en función del lugar de residencia actual de los jóvenes. Así, los residentes en las áreas metropolitanas de Barcelona y Madrid eligen la opción del piso en primera opción, con porcentajes ligeramente superiores al 40%.
Espacios minimalistas y luminosos
Luminosa (55,8%), confortable (39,5%) y limpia (37,7%). Así es como se imaginan a los encuestados su hogar del futuro cuando se les cuestiona sobre los elementos a los que darán más importancia a la planificación de su vivienda. En coherencia con la relevancia que los jóvenes dan a la luminosidad, la gran mayoría de la generación Z (más del 75%) también considera vital que la vivienda disponga de un espacio exterior, ya sea una gran terraza o un jardín.
Delimitación del espacio de trabajo y personal
A pesar de la tendencia a contar con viviendas más flexibles y adaptables, la generación Z prefiere contar con un espacio dedicado específicamente a trabajar o estudiar: un 57,6% elige el despacho como habitación idónea para el ámbito profesional.
Prioridad tecnológica
El estudio evidencia que la digitalización y la sostenibilidad son dos de los principales rasgos de los jóvenes. La tecnología ocupa un lugar clave en la vivienda, pero de forma integrada y sostenible. Es una tecnología vinculada al ahorro económico personal y la sostenibilidad de los recursos. De hecho, siete de cada diez encuestados tienen en cuenta la idea de un hogar sostenible, con una clara apuesta por materiales reciclados y de segunda mano.
Precariedad laboral
‘El estudio nos define el hogar deseado por la generación z, aunque la precariedad laboral y la dificultad para ahorrar dificultan que buena parte de este colectivo puedan acceder a una vivienda en propiedad, y muchos de ellos optan para compartir vivienda’, señala Maria Andreu, socia directora de la inmobiliaria santcugatense Feliu Franquesa, quien afirma que ‘la vivienda compartida pasa de ser una solución temporal a una fórmula de acceso a largo plazo, especialmente en el caso de la generación z’. Andreu aboga por fomentar políticas públicas que ayuden a los jóvenes a comprar su primera vivienda.